Pastoral
La formación para el ministerio presbiteral en nuestra diócesis está inserta en el Proceso Diocesano de Nueva Evangelización (PRODINE), de tal manera que los llamados a ser presbíteros se preparen con suficiencia en el conocimiento, desarrollo y ejecución del plan pastoral que se viene realizando desde el año 1996.
Somos conscientes que la finalidad primaria del Seminario es “la formación de verdaderos pastores”[1] ; y que todos los aspectos de la formación (humano, espiritual, intelectual, pastoral y comunitario), armónicamente integrados, deben confluir conjuntamente en la formación pastoral[2]. Así mismo que la formación pastoral pertenece al ser mismo de la Iglesia que es, por definición, evangelizadora y misionera[3]
Vale la pena anotar que la formación pastoral parte de nuestra realidad particular; de la cual se ha hecho un diagnóstico como punto de partida para trazar el plan pastoral de la diócesis. Por esto vemos necesario crear en los candidatos una mentalidad de pastores y una personalidad apostólica que los capacite integralmente para responder a los retos actuales y cambiantes, y que aúne con las particularidades propias de nuestra región, se presenta también un marco común a la situación de todo el país.
Este Seminario busca ante todo formar un hombre capaz de ser pastor según el corazón de Dios, decidido seguidor del Señor Jesucristo que transparenta la alegría de ser su discípulo.
En tal sentido, el pastor para la Nueva Evangelización que se adelanta en nuestra diócesis debe ser un hombre de vida humana y cristiana auténtica, capaz de trabajar en comunión con el obispo, sacerdotes, religiosos y laicos, que camina delante de las ovejas como líder, que es recio, de vida austera, generoso en la renuncia y en el sacrificio, capaz de compartir lo que es y lo que tiene
[1] OT 4
[2] Cfr. OT 4
[3] Cfr. Normas básicas para la formación inicial presbiteral en los seminarios mayores de Colombia. Conferencia episcopal de Colombia. Segunda edición. Santa tiene Bogotá. 1998. Pág. 78